Guimatur, un homenaje al oficio de mariscadoras.
Desde hace unos cuantos años, trabajamos con las mariscadoras del mayor banco marisquero de Galicia en el barrio de Santo Tomé de Cambados (Pontevedra). Cuando empezaron con su actividad, fuimos de las primeras empresas de guías que trabajamos con ellas, para enseñar a nuestros clientes la experiencia de ser mariscador por un día. Les hablamos de Guimatur, un homenaje al oficio de mariscadoras.
Desde el principio, siempre vimos más el lado humano de la experiencia, que lo que en sí nos contaban. Ya nos gustaría a muchos guías turísticos hacer y contar este tour con la pasión que lo hacen las mariscadoras de Cambados. Todo un aprendizaje de humildad para nuestra profesión.
La experiencia es algo más que ponerse una botas y bajar al banco marisquero para que te enseñen las distintas especies de almejas o mariscos que allí se cultivan. Que si la japónica, la fina y no sé cuantas cosas más, y todo esto disfrutando de un paisaje en pleno corazón de la ría de Arousa con la Isla de la Toja de testigo al fondo en más de un millón de metros cuadrados de extensión cuando la seca.
De lo que la presidenta de la cofradía y otras mariscadoras, las cuales fueron formadas para atender grupos de turistas o visitantes, nos hablan en realidad es de la dignificación de un trabajo durísimo, sobre todo realizado por mujeres, como economía de sustento complementario al de sus maridos que estaban en la mar.
Y hablan de todo. De cómo eran las construcciones de sus casas, muchas de ellas dimensionadas por el tamaño de los remos de sus chalanas, pintadas con los restos de las pinturas de los barcos y algunas de sus paredes decoradas con conchas, no por estética, sino por necesidad, todos ellos símbolos de pobreza o riqueza según se vea. Nos hablan de cómo se esquilmó la riqueza marisquera de la zona por ignorancia y cómo, a base de muchos palos y de mucha concienciación, recuperaron la dignidad del oficio, que hoy les obliga a tasar la recogida diaria tanto en peso como en tamaños de las piezas para hacer la producción verdaderamente sostenible.
Pueden complementar el servicio, saliendo del Banco Marisquero visitando la lonja con ellas por ejemplo, que es otra experiencia digna de disfrutar. Te hablan del oficio de las "redeiras", de cómo funciona la lonja y la depuradora, y de cómo se ha recuperado un molino de mareas que había en la zona. Y podríamos seguir...
En fin, desde aquí nuestro homenaje a ellas, por ser de las primeras y por seguir manteniéndolo. Luego se habló del Turismo Mariñeiro, por allí pasó la oscarizada actriz norteamericana Gwyneth Paltrow, etc., pero desde Art Natura, homenajeamos a una de las primeras iniciativas que hicieron creíble lo que otros creen que inventaron y que a nosotros nos viene de perlas para ser más atractivos en lo que hacemos.